¡Qué divertido es esto de poder asomarse al mundo y soltar lo primero que nos pasa por la cabeza! Eso es un blog. Yo lo llamo onanismo psicológico, otros lo llaman pajas mentales, pero es que la nena tiene estudios. Y no creáis que aplico el término sólo a la blogosfera, qué va, para mí todo lo que sale de la mente de alguien es un íntimo producto de su imaginación y merece la misma apelación.
Lo que es fabuloso en esto de los blogs es que son accesibles a TODO el mundo. A todos los que hablen el idioma en que está escrito, claro, que como usemos un traductor automático esto se puede convertir en colitis mental, y la liamos.
Ya no hace falta tener un colega editor, pedir favores o caer bien a los críticos. Ahora todos podemos llegar a todas partes, lo que hay que encontrar es gente que nos lea. Y nos exponemos al público, como las trabajadoras del barrio rojo de Ámsterdam, a ver si nuestros escritos y nuestras ideas placen al público. Algunos tienen labia, suerte, contactos, lectores y se convierten en líderes de opinión. Y lo mejor es que la gente, con eso de que “son informaciones de primera mano”, se lo cree todo, todo, y todo.
Esto da a algunos bloggers un poder tremendo. Y ahí es donde entran en juego los intereses. Tiene que ser muy tentador aceptar remuneración para hablar bien de algo. Ya sea una empresa, un objeto, una persona, un partido político, o cualquier otra cosa que preocupe a los lectores de un blog concreto. Lo bueno es que el tiempo que pasas escribiendo deja de ser gratis, lo malo es la pérdida de objetividad y de libertad sobre los sujetos que se tratan y la forma de tratarlos. Tu blog deja de ser TU blog y ya no es un espacio donde verter lo que llevas dentro y exponerlo al mundo.
Vender las propias opiniones es como perder la virginidad. Las cosas nunca vuelven a ser iguales. Y la autocensura es mala, muy mala. Y así es como veo los blogs corporativos. Como una campaña más de comunicación. Marketing en estado puro. Es una ventana al interior de la empresa con filtros, con cortinas, con barrotes, con censura. Un empleado de una compañía que escriba en el blog corporativo no es objetivo. No puede serlo. Por un problema de distancia y por un problema de intereses.
Por eso aprovecho mientras dure, que soy libre y puedo decir lo que quiero, o hablar de cualquier tema que me interese. Aunque por una caña, me dejo sugerir ideas :-)
“Para JFT”
Lo que es fabuloso en esto de los blogs es que son accesibles a TODO el mundo. A todos los que hablen el idioma en que está escrito, claro, que como usemos un traductor automático esto se puede convertir en colitis mental, y la liamos.
Ya no hace falta tener un colega editor, pedir favores o caer bien a los críticos. Ahora todos podemos llegar a todas partes, lo que hay que encontrar es gente que nos lea. Y nos exponemos al público, como las trabajadoras del barrio rojo de Ámsterdam, a ver si nuestros escritos y nuestras ideas placen al público. Algunos tienen labia, suerte, contactos, lectores y se convierten en líderes de opinión. Y lo mejor es que la gente, con eso de que “son informaciones de primera mano”, se lo cree todo, todo, y todo.
Esto da a algunos bloggers un poder tremendo. Y ahí es donde entran en juego los intereses. Tiene que ser muy tentador aceptar remuneración para hablar bien de algo. Ya sea una empresa, un objeto, una persona, un partido político, o cualquier otra cosa que preocupe a los lectores de un blog concreto. Lo bueno es que el tiempo que pasas escribiendo deja de ser gratis, lo malo es la pérdida de objetividad y de libertad sobre los sujetos que se tratan y la forma de tratarlos. Tu blog deja de ser TU blog y ya no es un espacio donde verter lo que llevas dentro y exponerlo al mundo.
Vender las propias opiniones es como perder la virginidad. Las cosas nunca vuelven a ser iguales. Y la autocensura es mala, muy mala. Y así es como veo los blogs corporativos. Como una campaña más de comunicación. Marketing en estado puro. Es una ventana al interior de la empresa con filtros, con cortinas, con barrotes, con censura. Un empleado de una compañía que escriba en el blog corporativo no es objetivo. No puede serlo. Por un problema de distancia y por un problema de intereses.
Por eso aprovecho mientras dure, que soy libre y puedo decir lo que quiero, o hablar de cualquier tema que me interese. Aunque por una caña, me dejo sugerir ideas :-)
“Para JFT”
Gracias por la dedicatoria.
ResponderEliminarPerdona la cabezonería. Desciendo de un orensano y su familia es agricultora (ya sabes, cazadoes - agricultores). Me parece que tenemos neuronas arados, esto es, cogemos el surco de una idea y hasta la linde del vecino y media vuelta.
Hasta aquí he llegado, hasta tu linde.
La objetividad que pides la veo en composición de varios espejos.
El que blogea desde su empresa, como dices, se filtra desde el inicio.
Pero también dices que TODO es público.
Ahí esta la gracia.
Se puede responder y te cazan si eres un vil seguidor.
Hay Microsoft y Microsiervos. Hay expertos y expertos.
La idea de que los blogs formen parte el marketing tiene su peligro pero es un marketing más abierto que un puro anuncio.
Lo que si me preocupa y que creo que nos haces ver con detalle, es lo de agradar al público. Esa prostitución es la peor.
El vivir de la masa es algo tremento. La audiencia lo justifica todo....
De todas formas, queriamos saber tu opinión.
Lo de la caña, siempre que quieras.
Acaban de publicar en Dans un dato curioso.
ResponderEliminarUn alumno crea un blog critico.
Se montan el follón
Y salen tres anonimos más criticos que el censurado.
¿ves? los que no quieren estar en la guerra la pierden.
Mis queridos amigos:
ResponderEliminartengan en cuenta que el medio no es el mensaje.
El arte y la manipulación buscan siempre nuevas formas, se refinan, se sofistican, se adaptan a los nuevos tiempos y a los nuevos públicos.
La cuestión periodista-proxeneta-prostituto no parece que pierda su esencia al pasar de la pluma al teclado
Me choca realmente sobre lo que comentas de que grandes blogers pueden influenciar sobremanera en la opinión de la gente.
ResponderEliminarPero esto comenzara a preocuparme cuando deje de hacerlo el echo de que la gente cuando ve una noticia en un telediario ya forma parte de una verdad universal irrefutable y unica.
Es más, gracias a los blogers puedes contrastar lo que ves en la realidad y lo que lees en la red y apartir de ahi elaborar tu propio juicio.
Un saludo :)
A mí me preocupa que alguien que cobra por dar su opinión tenga mucha influencia. Porque cuando cobras dejas de ser objetivo.
ResponderEliminarQue los periodistas cobran, que lo que sale en la tele no es gratis, sino que mueve mucha pasta lo sabemos todos, por eso ponemos en marcha filtros que nos dicen qué es posible que sea cierto, qué es posible que esté manipulado, qué es posible que sea mentira. Y a eso lo llamamos espíritu crítico. Muchas veces ni siquiera contrastamos las noticias, simplemente damos por hecho que hay una buena parte de mentira, y vemos las del canal que más se acerca a nuestra ideología.
En el momento de leer un blog, yo por lo menos bajo la guardia, tiendo a pensar que se trata de opiniones libres, sin intercambio monetario, y por lo tanto que estarán sesgadas sólo por las ideas del autor, y no por intereses políticos o comerciales.
Por problemas de tiempo, no puedo contrastar cada cosa que leo o que escucho, y me gusta pensar que leo las opiniones de gente que dice realmente lo que piensa, por eso leo blogs y periódicos (siempre varios) y no veo el telediario. Si descubro que cobran por hacerlo, por hablar bien de tal o cual marca o producto o servicio, tendrán para mí la misma credibilidad que la televisión (que sigue sin funcionar) y cambiaré de cadena, de web, o me dedicaré a los juegos, que son lo mío y me dejaré de tanta tontería.
Y que conste que me parece fabuloso tener un canal de comunicación al que tiene acceso tanta gente y que permite exponer opiniones sin pasar por la casilla “editor”. Pero quiero que siga siendo independiente, autónomo, libre y sin censura. Por eso me da miedo que se meta el dinero de por medio.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarBueno si, tienes razón, pero entonces que actitud puedes tener? Entrar en un blog y si no hay publicidad pensar que no esta influenciado? podria ser... pero para eso ya esta la repanoja que son los comentarios, y es lo que hace grande un sitio, pq si la gente le da la razón o se discute mucho pues ya te puedes hacer una idea de una cosa u otra.
ResponderEliminarYa la conspiranoia podria ser pensar que el autor se dedica a autocomentarse en su propio blog cambiando de ip cada 2x3 y de nick para parecer qeu tiene muchas visitas y que todos le quieren xD.
Pues te puede parecer tonteria, pero hay gente capaz de programar robots con esas habilidades y no es muy dificil, lo unico complejo seria quizas establecer un número de frases prefijadas y que el robot cada vez postee con un nick al azar desde una ip distinta y elija una frase al azar.
Y al azar el telon, ahi lo tienes, la parida mental que nos hace grandes.
pacogp.wordpress.com
pq toda paja mental hace montaña
Mmmm.. qué gran debate me he perdido..
ResponderEliminarDespués de leeros con algo de retraso, ...querida Abril, has dado en el clavo con el argumento McLuhanista.
No importa que quien vierte sus opiniones, quien se pone de un lado o de otro,.. lo haga en la tele, en un editorial de un periódico, en una tertulia en la radio o en la red.. No importa que cobre de un patrocinador o de un medio con determinada ideología, pero tampoco hay que dar por sentado que quien cobra vende su opinión.. En la mayoría de los casos, los que cobran por dar su opinión están muy a gusto con la opinión que están dando.. Así que se produce un fenómeno de doble satisfacción: cobran por algo con lo que, además, están de acuerdo.. Pero no hay que confundir esto con un "periodista".. Hay periodistas que se dedican a esto, pero en realidad son opinadores. ..(y luego hay una minoría que cobra por opinar porque lo que cobra por informar no les llega)
De otro lado, -nota para Angélica- el asunto del medio: No es más creíble una noticia escrita en un periódico que una que dan en la radio o en la tele. Lo único que cambia es el medio.Está muy bien que leas varios periódicos, pero serviría igual si vieras varios informativos de la tele o escucharas varios de la radio. En cualquier caso, eso es lo que hay que hacer. Intentar buscar el punto medio.La difícil virtud.
Seguiremos informando...
5mentario
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