martes, 18 de diciembre de 2007

Responsabilidad Social Corporativa (RSC) se escribe con E de escándalo



La noticia es la siguiente: Un grupo de auxiliares de vuelo de Ryanair deciden posar al más puro estilo pin-up del S XXI para un calendario. Las piezas del puzle son tres:

- Por un lado tenemos empresas cada vez más conscientes de que la RSC está de moda, y que el apoyo corporativo a las iniciativas de sus empleados en ese sentido suelen ser bien acogidas por la opinión pública.

- Por otro lado, el desnudo vende y da qué hablar. De siempre. Y más ahora que se ha extendido la práctica de posar desnudo para reivindicar, para recaudar, para casi cualquier cosa.

- Y por último, las nuevas tecnologías nos han hecho el mundo mucho más accesible, y nos han permitido descubrir nuestro lado más exhibicionista. Contamos al mundo lo que hacemos, cuándo lo hacemos, cómo lo hacemos y con quién a través del blog o de Twitter. Nos agrada ver nuestras fotos en pantalla y que las vea y comente todo el mundo en Flickr o Picasa. Compartimos nuestras aficiones colgando nuestros favoritos en del.icio.us… Y pese a toda esta orgía de mediatización digital de la persona, soñamos con dejar algo para la posteridad en forma de papel.


Teniendo en cuenta estas tres cosas, no es de extrañar primero, que las empleadas hayan decidido que podía ser divertido y se hayan prestado a posar desnudas, y segundo, que Ryanair haya apoyado con todo su esfuerzo a sus empleadas. Para empezar, porque le haría publicidad con una inversión mínima, pues era de prever que las fotos de las chicas terminaran apareciendo en los medios de comunicación. Después porque, al ser para una buena causa (los beneficios de la venta del calendario irán a parar a una asociación de personas con dependencia crónica), pensaban librarse del escándalo. Y por último, porque encaja en su forma de comunicar agresiva e impactante.

Si buscaban impacto mediático lo han conseguido. Con una denuncia de la FACUA y del Instituto de la Mujer acusándoles de todos los males de la humanidad, machismo, perpetuación de los estereotipos sexistas, denigración de la mujer trabajadora, provocadores de la violencia de género…

Seamos serios. Hace un par de días recibí una presentación con las fotos de la selección de rugby francesa al desnudo. En actitudes mucho más sugerentes que las de las trabajadoras de la aerolínea y con mucha menos ropa. Y, aunque han pasado las horas, sigo sin pensar que los deportistas sean objetos sexuales, y tampoco me han entrado ganas de salir a agredir a mi vecino del tercero.

No se puede echar la culpa de algo tan serio como es la violencia de género a un tema tan frívolo como unas fotos de calendario. No deja de ser atacar las formas por no entrar en el fondo. Escandalizarse por imágenes como esas (que dicho sea de paso se ven en cada parada de autobús, en cada anuncio televisivo, en cada revista femenina) no lleva a ningún sitio.

La violencia de género se ataja con educación y tolerancia, y no con represión y prohibiciones. De hecho, siempre he creído que al esconder ciertas cosas, se genera aún más deseo, más violento, más salvaje y mucho más enfermo.

El cuerpo humano es bello, y sólo cuando deje de ser estigmatizado y de ser considerado como algo sucio que hay que esconder dejaremos de poner el grito en el cielo porque un grupo de mujeres jóvenes y guapas han querido posar para que las inmortalicen en un calendario.

sábado, 1 de diciembre de 2007

La petite mort



Une vidéo qui a fait fureur entre les bloggeurs espagnols. Au fait, c'est une pub pour une ligne de produits érotiques.

Cette vidéo a été reproduite partout dans le web. C'est ce qu'on appelle marketing viral ou de guérilla. Avec une bonne idée, originale, qui plaise aux internautes, une agence de publicité peut réussir à avoir une énorme diffusion d’une campagne de pub sans grande inversion. Tout comme la vidéo de Dove, que j’ai déjà publié dans une autre entrée, on ne verra pas ces annonces à la télé. Mais tous les deux ont eu une audience qui dépasse de loin celle des pubs traditionnelles.

Quand on télécharge une vidéo pour la regarder de notre navigateur web, on y prête attention. Si elle nous plaît, on l’enverra à nos amis, on l’accrochera sur nos blogs, ou dans le FunWall de Facebook, on partage, on diffuse, on en parle au café, au dîner, on devient curieux, on connaît la marque, l’histoire, le making of.

Une recommandation aux publicitaires, faites des pubs qui plaisent, qui donnent envie d’être partagées, qui font parler sur le net. De plus en plus, on regarde la télé le PC sur les genoux, et on ne prête pas attention aux espaces publicitaires, le zapping n’est plus de mise, simplement on change d’écran, l’attention est partagée, et si vous voulez la capter pour nous vendre vos produits vous avez intérêt à renouveler les stratégies de vente. C’est une toute autre approche, mais c’est le futur.